El fundador de Zara, uno de los tres hombres más ricos del planeta y la mayor fortuna de España es una persona muy discreta, que ha dado muy pocas entrevistas en su larga carrera. Sin embargo, en las raras ocasiones en las que habló en público nos ha dejado algunas frases muy interesantes. He seleccionado 5 de ellas para este nuevo capítulo de consejos de grandes emprendedores de la Historia.
1º- Si he ganado tanto dinero es porque mi objetivo no ha sido nunca ganar dinero.
Seguro que a más de un lector esto le parecerá una afirmación muy hipócrita, y más viniendo de una persona con una fortuna tan inmensa. Sin embargo tras esta frase hay una gran verdad del mundo de los negocios: si montas una empresa con el único objetivo de ganar dinero tendrás problemas más temprano que tarde. Porque la prioridad absoluta es satisfacer al cliente. Si antepones el dinero al cliente caerás en una visión cortoplacista que te puede reportar algunos beneficios durante un tiempo, pero que acabará perjudicando tu negocio.
2º- Quiero soluciones inmediatas a los problemas. Si hay que viajar hoy, no importa.
Reactividad y flexibilidad. La procrastinación no sirve de nada en el mundo empresarial, porque muy raramente un problema se va a solucionar solo. Amancio Ortega también afirma que no le gustan los pensadores, sino las personas de acción. Y es otra lección importante para los emprendedores: es mejor actuar rápido y equivocarse alguna vez que pensar demasiado. Porque si eres una persona de acción y te equivocas, enseguida tomas otra medida correctora y aprendes de tu fallo.
3º- Soy un activo de la empresa. No nos pueden copiar a las personas.
Si hay una idea que repiten prácticamente todos los grandes empresarios que hemos citado en este blog es que las empresas son primero las personas. Y es algo que también he comentado más de una vez cuando hablo de la idea de negocio. Lo importante para el éxito de una empresa no es tanto si tiene una idea buena, sino como la pone en práctica. ¿Quién implementa? Las personas. Por eso tiene tanto valor el capital humano.
4º- Hay que ser discretos. La abundancia de información hacia el exterior genera grietas.
Amancio Ortega es un hombre extremadamente discreto. Teniendo en cuenta que es una de las mayores fortunas mundiales y el dueño de una marca muy conocida del gran público, es muy extraño que se sepa tan poco de él. Todos esos años ha protegido su imagen, y aplica el mismo principio a su negocio. Lo que realmente cuenta es hacer las cosas bien para que los clientes estén satisfechos.
5º- En Zara existe una responsabilidad individualizada y no el sentido de la responsabilidad de equipo.
Nada de excusas. Si alguien se equivoca tiene que asumir su responsabilidad. Si había más de una persona involucrada, cada una asume su parte. Es una idea interesante porque los que hemos trabajado en grandes organizaciones sabemos como la dilución de responsabilidades es un freno a las iniciativas más arriesgadas. En las culturas empresariales donde ocurre esa dilución, las personas aprenden a no tomar iniciativas y a escudarse en la organización. Resultado: cuando hay un fracaso no hay ningún responsable, y cuando hay un éxito todo el mundo se cuelga medallas. Así es muy difícil aprender de los errores e innovar.