Uno de los principales objetivos de un retailer es, sin lugar a dudas, fomentar la fidelidad de sus clientes, es decir, conseguir convertir una simple visita en muchas, lograr que los usuarios repitan en su tienda y que le visiten con cierta regularidad. Y es que, bien es sabido que es mejor tener 10 clientes fieles que 100 que no lo son. Un cliente fiel nos elige a nosotros siempre antes que a nuestra competencia y además es nuestro mejor suscriptor ya que habla bien de nosotros y nos recomienda frente a sus familiares y amigos. Hasta aquí todo claro.
¿Cómo lo logramos?
Existen muchas medidas que podemos llevar a cabo para fidelizar a nuestros clientes. Normalmente ésta se consigue a través de dos puntos principales: un buen servicio y un buen precio. Si el retailer le ofrece al cliente una atención amable, si es simpático/a, servicial, si le aporta ideas y consejos y le da un buen servicio, el cliente se sentirá mucho más a gusto y, seguramente, conseguirá disfrutar de una experiencia de compra plena y satisfactoria. Si a esto le sumamos una buena estrategia de pricing, promociones y descuentos varios tendremos muchas papeletas para conseguir que el cliente sea fiel a nuestra marca.
¿Cómo se mide la fidelidad del cliente?
Gracias a la tecnología Wifi tracking hoy en día es posible conocer cuántos clientes nos visitan por primera vez y cuántos repiten con nosotros. En Flame conocemos este dato como la tasa de fidelización, un dato de gran valor ya que nos ayuda a llevar a cabo medidas para aumentar dicha tasa y conseguir más clientes fieles.
Imaginaros por ejemplo que hemos tenido 100 visitas y que 10 de las mismas corresponden a usuarios que ya nos habían visitado con anterioridad, mientras que el 90% de las mismas (90 clientes) nos están visitando por primera vez. En ese momento llevamos a cabo medidas como las que explicaba con anterioridad, por ejemplo, decidimos hacer una promoción especial en tienda. Ahora volvemos a medir y vemos que, efectivamente, la acción ha funcionado, ya que de las 240 visitas obtenidas, 45 habían estado previamente en nuestra tienda.
El objetivo, como decíamos al principio, siempre será aumentar esa tasa de fidelización, lograr que mayor número de usuarios quieran volver a nuestra tienda y que quieran repetir su experiencia de compra con nosotros. Ahora bien, para hacerlo bien siempre deberemos medir, porque midiendo tendremos datos objetivos que nos ayudarán a tomar las mejores decisiones para nuestro negocio. Ya sabéis, quien no mide, no mejora.