Cuando escuchamos la palabra Martech, desafortunadamente, tendemos a asociarla con el mundo online. Siempre (yo mismo incluido) utilizamos el término “marketing digital”, digamos, de manera inadecuada. Debemos acostumbrarnos a la idea de usar lo digital independientemente del canal o incluso del lugar. Simplemente debemos pensar que es posible usar un canal digital (un correo electrónico, por ejemplo) para comunicarse con alguien en un lugar físico (normalmente, una tienda).
Dicho esto, podemos decir que usar la palabra “online” está bastante relacionada con el contexto, mientras que la palabra “digital” está más relacionada con el canal. En un enfoque omnicanal real, debemos combinar ambos: contextos y canales. Por ejemplo, podemos llegar a una audiencia a través de un canal digital en un contexto físico y viceversa.
Es cierto que trabajar en el contexto físico requiere trabajar con cosas como IoT, Big Data, etc., pero afortunadamente, esto no es sea rocket science. Hoy en día, esas tecnologías son accesibles a todo el mundo gracias a plataformas independientes de hardware como Flame. Por lo general, me gusta pensar en estas infraestructuras de IoT (dispositivos WiFi, contadores de personas, iBeacons, etc.) como si fueran las cookies para el mundo físico. Este enfoque nos ayuda a centrarnos en los negocios en lugar de en la red troncal (cables, sensores…).
Me gusta pensar en estas infraestructuras de IoT como si fueran las cookies para el mundo físico
Cuando hablamos de Martech, no hace falta decir que no es solo algo relacionado con el contexto online. Algunas empresas como Flame, ya trabajamos para ofrecer herramientas de marketing digital para el mundo físico, herramientas que necesitan vivir dentro del ecosistema de Martech.
Entonces… ¿Las herramientas de análisis y marketing in-store deben combinarse con otras herramientas de Martech para proporcionar soluciones omnicanal reales? La respuesta es bastante obvia, lo sé. Pero es que no es solo eso, sino que las herramientas in-store son Martech en sí mismas; son parte del ecosistema y diría que se ajustan al “santo grial” de la omnicanalidad gracias a su capacidad de trabajar independientemente del contexto (físico o en línea) y del canal (físico o digital).
Un post de Jonathan Solís, CEO de Flame analytics.